jueves, 10 de septiembre de 2015

'Los 4 Fantásticos' son geniales y tú, un exagerado

Los 4 fantásticos

Hola Internet,

hoy voy a defender una película que gran parte de tu ser odia: 'Los Cuatro Fantásticos (2015)' de Josh Trank porque me encantan esas pelis a las que se les ven las costuras, narran un drama  humano detrás de las cámaras y nos enseñan lo peor de la condición humana: el contagio sin sentido de la estupidez y el odio.



La cinta empieza con un rollo ochentero que tanto gusta a los treintañeros de hoy y que recuerda en estética a clásicos sobrevalorados como los 'Goonies' o fenomenales piezas más modernas como 'Super 8' de J.J. Abrams. Es la típica historia de orígenes superheróicos pero contada con más o menos gracia (Trank es el director de 'Chronicle', cinta que en plan mockumentary cuenta cómo unos jóvenes adquieren poderes molones y hacen cosas no buenas).

La cosa sigue con los niños Mr. Fantástico y la Cosa con mucha química, presentando un experimento genial en un momento en el que todo el mundo les desprecia. Luego crecen y presentan la versión Beta del mismo experimento. Es cuando aparece el tipo que le ponía chuletas a Frank Underwood que se ha hecho científico y les contrata para abrir una puerta a la Zona Negativa, que aquí llaman de otra manera no se por qué.

Bien. A mi parecer, aquí empiezan los problemas de la cinta: el largo desarrollo sobre cómo obtienen los poderes y el posterior enfado forzado entre el ya joven Mr. Fantástico y la Cosa lastran gran parte del ritmo y no dejan avanzar la trama. Después, en un pretendido cierre profundo o emocional no dejan de sucederse en clichés que si bien se le pueden perdonar a Stallone en sus cintas menos inspiradas aquí huele mucha violencia en la producción: no hay un desarrollo de los personajes como grupo pero se tiene que formar un equipo porque la película quería ir de eso.

El otro gran problema de la cinta es el desastroso diseño del personaje de Doctor Doom (aún no entiendo como no copiaron algún cosplay) y el anticlimax. La batalla final en una cinta de supers tendría que haber sido mucho más y no esos cuatro saltos mal pegados y esa rácana demostración de habilidades. Que Doom no les pueda explotar la cabeza a los protas como si hace con personajes randoms -escena que me pareció genial por su flirteo con el terror- podría explicarse con que está ocupado destruyendo la Tierra y eso requiere, casi seguro, algo de concentración.

Para más inri, el momento de ellos juntos cerca de la barandilla no diciendo cómo se va a llamar su súper-grupo recuerda, desafortunadamente, a cuando el Capi en 'Vengadores: la Era de Ultrón' tampoco dice eso de 'Vengadores... reuníos'.

Son estos tres puntos: el tedioso desarrollo del nudo, lo insatisfactorio de la batalla final y los saltos de estilo; de una cinta de aventuras a terror, a otra de acción (o, lo que es lo mismo, un intento de ejercicio de cine autor), los que parecen evidenciar, además de todo lo aireado por la prensa, la batalla que hubo en la producción de este último rodaje maldito de Hollywood.

LA ANTORCHA HUMANA ES NEGRO

La polémica porque la Antorcha Humana sea negro resalta lo imbéciles que podemos llegar a ser los humanos y un cierto maquiavelismo por parte de Marvel Studios: todo el mundo acepta que Nick Furia sea Samuel L. Jackson, a pesar de que antes fuera Mitch Bucanan, porque el Nick Furia negro del Universo Ultimate lo parte, pero esta blackización, al ser una decisión independiente de los villanos de la FOX, supone una herejía. En fin. "Por estúpida que sea una idea siempre habrá alguien que quiera seguirla con toda su alma", dijo una vez un señor muy listo.

Pues eso, cuando una mera película de superhéroes -personajes ficticios que levantan más pasión que el fútbol- revuelve Internet y hace que todos, incluso los implicados en la película generen odio, es cuando te das cuenta de que somos unos exagerados y unos alarmistas y es que hoy, una o dos semanas después del estreno, ya nadie habla de la película.

Y ya está, no es para tanto. Es una peli normalita, algo aburrida en su tramo final, por lo que cuenta en pantalla, pero fantástica (badumtsss) por lo que deja ver por detrás: que unos cuantos no se han aclarado y han hecho una película 'meh' y que muchos odian las cosas como si les hubieran tocado a la madre o hubieran manipulado sus recuerdos de niño. Fin de la historia.  Por esto 'Los 4 Fantásticos' de Josh Trank son geniales y tú, un exagerado.

Ala, ya me he desquitado,

Atentamente,

Hect de PARANIMALS